Para un norteño estar en la CDMX a veces es un tanto complicado sobre todo para conseguir comida de por aquellos lares. Gracias a Dios hace algunos años llegó la Taquería Orinoco, desde Monterrey para ser precisos. Con un menú que es una delicia, qué digo delicia, es una joya.
Tacos, volcanes y gringas son sus reyes, acá puedes escoger entre el famoso trompo norteño, que es como el pastor pero más perrón, cocinado al carbón con cortes gruesos, carne de res que es como diezmillo para asa o chicharrón con lonja, un verdadero orgasmo al paladar.
Además de esta deliciosa trinidad, tenemos las papitas apachurradas con cada orden o por separado, que son papas cambray cocidas, apachurradas y luego fritas, qué cosa. También hay frijoles charros, con y sin carne. Todo esto acompañado de su agua fresca signature, jamaica con guayaba en vaso de aluminio y chingo de hielos, ya con eso padre.
Y qué te digo de sus salsas, tienen 5 diferentes, la de chile piquín es otro pedo, está muy buena, la verde, la de ajo, de serrano, nooo, todas están chidas.
Ya para qué te digo más, ve a darte una vuelta y me cuentas qué tal. Y si puedes pídete un buñuelo con helado de postre.